-Como siempre
-¿ y qué es como siempre?
-Bien
-¿Lo dices por decir o lo dices de verdad?
-¿Si te lo dijera por decir qué me haría ahora decirte la verdad?
-¿porqué siempre contestas a mis preguntas con otra pregunta.
-¿Por qué no?
-Lo has vuelto a hacer.
-No te he dicho que fuera a dejar de hacerlo.
-¿Quieres estar bien algún día?
-Por su puesto que sí
-¿Entonces por qué no lo intentas?
-Porque me he pasado toda mi vida intentandolo. Y he descubierto que la felicidad no existe.
-¿Y cómo sabes que no estás equivocada?
-No lo sé. Simplemente lo creo. Pido cada día cambiar de parecer y estar equivocada. Pero no puedo.
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